La atención que podemos prestar es limitada, "un juego de suma cero", como explican en Sharpbrains. Para dedicar más atención a una actividad (buscar aparcamiento) debemos restar atención de otra (escuchar la radio). En cambio, antes de buscar aparcamiento es muy probable que hayamos necesitado atender menos al camino y más a la música porque cada día hacemos la misma ruta al volver de la oficina. Otro ejemplo, sacado de Pensar rápido, pensar despacio y citado en Quora: podemos caminar y hablar al mismo tiempo sin problemas, pero si caminamos y a la vez intentamos resolver un cálculo complicado, pasaremos a caminar más lentamente. Es decir, no somos multitarea.